Comprar Acciones del Banco Santander

Creada originariamente en 1857 por la unión de seis importantes comerciantes locales que utilizaban el puerto de Santander (Cantabria) para sus exportaciones e importaciones, el Santander es considerado en la actualidad el banco más grande de España en cuanto a activos. Gobernada por la familia Botín desde 1909, se calcula que el Banco Santander cerró 2017 con un volumen total de aproximadamente 1.444.305 millones en activos. A 31 de diciembre del 2017, la entidad financiera poseía 13.697 oficinas, más de 200.000 trabajadores y 133 millones de clientes. 

El Banco Santander es asimismo la segunda empresa española en cuanto a capitalización y el mayor banco de la eurozona también según capitalización.

Podemos decir que su crecimiento a lo largo de la historia no sólo se debe a la gestión propia de la entidad sino por su activa política en la absorción de entidades con dificultades, hecho del cual tenemos el último ejemplo en el Banco Popular, comprado por Santander a un euro. Son muchas las entidades que con el tiempo se han integrado en el Santander, pero sólo por mencionar algunas podemos hablar del Banco Central, el Banco Hispano Americano y el Banco Español de Crédito, tres de los bancos más importantes de España después de la transición. 

En cuanto a su expansión internacional, el Grupo Santander está presente en gran parte de los países de Europa y es una de las principales entidades financieras de América Latina, donde opera con su propio nombre y participa en las bolsas nacionales. También está presente en parte del mercado asiático y africano. 

Es importante conocer que aproximadamente el 70% de sus beneficios provienen del área minorista, es decir, del trato directo con el cliente, hecho que lo hace especialmente sensible a factores sociales y económicos y lo acercan a la banca tradicional.  

A diferencia de las cotizaciones de otras empresas que hemos analizado en este mismo blog (Amazon por ejemplo), las acciones de Santander tienen un largo historial en bolsa. Su largo recorrido histórico y su expansión a los principales mercados hispanos y europeos ha hecho que hoy en día las acciones del Santander se encuentren en ___ mercados del mundo. 

No obstante, su origen y su principal mercado sigue siendo el español, por lo que analizaremos su evolución en la misma. No sería lógico realizar una evolución desde sus inicios, ya que la perspectiva, los valores y el funcionamiento de la economía ha canviado a lo largo de los más de 150 años de vida del Santander. Así, tomaremos como referencia el año 2003 para ver su evolución a lo largo de los años y, como solemos hacer habitualmente, los últimos 6 meses para ver su evolución reciente. 

Como vemos, desde el año 2003 hasta nuestros la cotización del Santander ha tenido una evolución cíclica que podemos equipararla al estado de la economía española según la época. La época precrisis y del boom inmobiliario el valor del Santander en bolsa tuvo una tendencia alcista imparable, tendencia que tuvo un abrupto final con el inicio de la crisis. Como vemos, de los casi 15 euros que valía la acción del Santander a finales del 2007, pasó a valer menos de 5 euros a principios del 2009, es decir, en pocos meses sus acciones pasaron a valer una tercera parte de lo que valían. Es cierto que a inicios del 2010 sus acciones volvieron a subir por encima de los 10 euros pero este rebote vino seguido de otro descenso, más paulatino, que sitúo sus acciones otra vez por debajo de los 5 euros durante el 2012. Podemos decir que la cotización del Santander ha sido variable desde entonces con subidas y bajadas por igual pero nunca llegando al valor del Santander en bolsa durante las épocas precrisis.

Los últimos seis meses el Santander ha tenido de todo, pero lo cierto es que sus acciones han descendido casi un euro desde finales del 2017. Su principal descenso vino durante el mes de mayo en el contexto de la moción de censura a Mariano Rajoy y la inestabilidad política consecuente en España y la investidura del nuevo gobierno en Italía. No obstante, una vez pasadas estas noticias las acciones del Santander suben de nuevo poco a poco.

Comprar acciones del Santander, de igual manera que de otra empresa o compañía, no siempres es fácil y muchas veces tenemos que acudir a grupos financieros (o a la misma entidad) para ceder nuestro dinero, teniendo que dejar en sus manos la elección de acciones o fondos en los que invertir. Pese a que esta opción es cómoda, no siempre nos permite tener el control de nuestra inversión y, por tanto, nos deja a un lado en la elección de dónde invertir nuestro dinero.

Una opción para tener control directo de nuestro dinero a la hora de invertir son los CFD (hay que recordar que no son productos sencillos y que su uso no está recomendado para los inversores minoristas según la CNMV), productos financieros arriesgados y complejos pero que nos permiten tener el control de nuestro dinero. Así, si queremos invertir en acciones del Santander de forma directa, bajo nuestra responsabilidad, los CFD pueden ser una opción.

Este tipo de productos funcionan en base a lo que se llama el apalancamiento, es decir, se trata de poner sólo parte del dinero de la inversión y pedir prestado el resto a operadoes como eToro. Por ejemplo, si queremos invertir en una acción y el operador nos ofrece un apalancamiento del 1 / 8, nosotros sólo pondremos 1 parte de las 8 partes en el que se divide la acción. Esto, traducido a un ejemplo más concreto aún sería como lo siguiente: Si queremos invertir en acciones del Santander y el operador nos ofrece un apalancamiento de 1/10, nosotros sólo pondremos una décima parte del dinero que cuesta la acción y el operador pondrá el resto. Si la acción valiera 10 euros nosotros sólo pondríamos 1 yel operador 9. Si, como hemos visto, la cotización del Santander en bolsa está a ____ aproximadamente y el apalancamiento que nos ofrece el operador de CFDs es de 1/10, sólo tendríamos que poner ____ y la entidad nos prestaría el resto.

Más allá de hacer más accesible la inversión en el Santander, este tipo de productos nos pueden reportar muchas más ganancias que el que nos corresponderían por el dinero invertido. Así, nuestras ganancias serían las del total de la inversión, es decir, si el valor de las acciones del Santander subiera un 1% durante el periodo en que mantuvieramos la inversión, nuestras ganancias serían las del total de la acción, es decir, de ___ euros. La idea es que invirtiendo sólo en parte de la acción recojamos las ganancias que reporte la acción completa.

No obstante, hay que tener en cuenta (y de aquí el mayor riesgo de este tipo de contratos), que si la acción en la que hemos invertido cae, si la inversión nos sale negativa, no sólo perderemos lo proporcional a lo que hemos invertido sino las pérdidas de la totalidad de la acción. 

Tanto para bien como para mal, con los CFDs, se entiende que recogemos las ganancias y las pérdidas de la totalidad de la acción en la que invirtamos poniendo sólo parte del dinero que cuesta.

Para operar con CFDs del Santander o de cualquier otra empresa, índice o fondo, podemos hacerlo utilizando operadores como eToro, los cuales nos cobran pequeñas comisiones a cambio de utilizar el servicio. Si quiere informarse de cómo funcionan y comenzar a operar, puede hacerlo a través de este enlace.

Además de ganar o perder las ganancias o pérdidas totales invirtiendo sólo parte de lo que vale la acción, los CFDs también nos ofrecen otro tipo de estrategias para que personalicemos aún más nuestra inversión en el Santander.

Así, podemos invertir a la baja en el Santander, es decir, podemos ponernos en corto, invertir pensando en que las acciones del Santander bajen. Esta forma de inversión alejada de la tradicional nos permite decidir y ganar dinero tanto si la cotización del Santander sube como si baja. 

La técnica consiste en que el operador de CFDs nos permite vender desde ya, con el precio de ahora, una acción que comprarás más adelante. Sí, es el mundo al revés pero las CFDs permiten este tipo de operaciones. Si estamos convencidos de que la acción del Santander bajará podemos vender ahora la acción que contratemos cuando el precio sea más bajo que el de ahora.

Es importante remarcar que tanto la inversión tradicional como el conocido como ponerse en corto (ganar cuando las acciones bajan) requieren de un conocimiento profundo de lo que se está haciendo, así como de información fiable para saber cómo afrontar la inversión en el Santander o cualquier otra acción. 

También te recomendamos echar un ojo a nuestro artículo de cómo invertir en acciones de Apple o ver nuestra sección de cómo comprar acciones de bolsa.